Por Anaiz Quevedo Tal como lo escribiese Nicholas Kristof en su artículo “La Edad de la Ambición” para New York Times, la juventud de nuestros tiempos parece estar más en la vía de modelar este mundo que los encargados de llevar adelante las políticas sociales.
Kristof estuvo en Davos, Suiza, y dijo textualmente que las personas más interesantes en el más reciente Foro Económico Mundial resultó la gente joven , no solo por tener la mitad de edad de quienes asistieron, sino por asumir el compromiso de ser "emprendedores sociales".
Mencionó varios casos interesantísimos de veinteañeros(as) que han creado Organizaciones de Desarrollo Social o compañías socialmente responsables con alcances inimaginables para su corta edad. Han logrado llegar a miles de personas que han sido atendidas en países empobrecidos ya sea con capacitación, créditos, o ayudas en sus problemas de salud o económicos.
De todos los casos me llamo la atención el del joven mexicano Ariel Zilbersztejn de 27 años que fundó la compañía Cinepop a través de la cual proyecta películas en pantallas gigantes en parques públicos ya que está consciente que un gran porcentaje de mexicanos(as) no tienen los ingresos suficientes para ir al cine. Además cuenta con el apoyo de varios patrocinantes que se suman a la iniciativa en una relación ganar-ganar.
La capacidad por función puede llegar hasta 10 mil personas, por lo que las marcas asociadas encuentran un espacio idóneo para interactuar con un gran volumen de público objetivo, vender productos, afiliar gente a sus líneas de crédito, comunicar promociones, etc.; así, la inversión resulta muy atractiva y rentable pues las marcas generan una promoción en la cual consumidores(as) perciben un gran valor, se genera una gran recordación de las marcas, fidelidad e incremento en ventas, comprometiéndose y apoyando a la vez con la sociedad, en este caso, con el sector más necesitado.
Por lado leyendo al colega Peter Walker en CNN.com en su trabajo “El microempresario benevolente” también conocí el caso de la Organización sin fines de lucro KIVA creada por ex alumnos de la Escuela de Negocios de Stanford, Matt y Jessica Jackley Flannery. Su actual Presidente, Premal Shah se interesó en microfinanzas también durante sus estudios en Stanford por lo que estuvo en India trabajando en una institución dedicada a trabajar con los más pobres de los pobres. KIVA está sonando porque más que dividir grandes sumas de dinero de grandes patrocinadores o prestamistas, permite a individuos prestar pequeñas sumas a un(a) emprendedor(a)
Luego de dos años de trabajo KIVA ha atraído $ 1.5 millones en el mes y ha otorgado en préstamos $ 12.4 millones a 18 mil emprendedores(as) en 39 países. KIVA es una gran red en la que interesados(as) en ayudar a gente emprendedora de las zonas más pobres del planeta pueden prestar 25 dólares y hacerlo vía web (la compañía PayPal lo ofrece gratis). La página web de KIVA es un collage de casos positivos, con fotos de emprendedores(as) y sus prestamistas. KIVA conecta a gente sencilla que desea ayudar con quienes necesitan esta ayuda en un proceso auditable. Los casos expuestos son referidos por más de 67 instituciones microfinancieras a nivel mundial.
Walker cita a Matt Flannery “Esta forma de ayudar a los demás se hace hasta adictiva, especialmente cuando quienes prestan saben que verán su dinero de nuevo”. Se está enseñando a quienes desean progresar a ser independientes y autosustentables.
Al conocer todos estos casos, coincido con mis colegas en que esta es la era de los(as) emprendedores(as) sociales. Kristof menciona que en los 60, la juventud al menos en Estados Unidos, se centró en las protestas antibélicas e iniciaron movimientos que transformaron ese país. En los 80 Bill Gates y Steve Jobs revolucionaron la tecnología.
El siglo XXI ya recibe las huellas del emprendimiento socialmente responsable. ¡Que perdure y se multiplique!
La juventud del siglo XXI está cambiando al mundo
Enviado por
Anaiz Quevedo
.
domingo, 10 de febrero de 2008
Entradas anteriores
-
▼
2008
-
▼
febrero
- El diálogo con los grupos de interés no es tan dif...
- Análisis de la nueva Ley de Balance Social en Buen...
- La Responsabilidad Individual en la Responsabilida...
- El Pacto Mundial no es tan 'gratis': la lista negr...
- La diversidad lingüística enriquece, ¡no ensucia!
- Economistas sin avales ni garantías
- Les bases per a la llei d’educació: una amenaça o ...
- Corresponsables: hay quienes más, hay quienes menos
- Discapacidad...redimensión del concepto
- Consejo Estatal de RSE: nació mal, le llamaron mal
- El peligro de poner color a las noticias
- El comercial de Amnistía Internacional 'censurado'...
- Pedir perdón por delitos pasados contra comunidade...
- La juventud del siglo XXI está cambiando al mundo
- "Diferentes habilidades" publicitarias
- Heroísmo
- Tener ‘líder’ en RSC, la tendencia de los bancos e...
- Reflexión Social Comprometida: Endesa en Chile
- Al Gore: la bestia 'verde'
- Emprender con responsabilidad
- La RSC en España en 2008
- No es limpiar es no ensuciar
-
▼
febrero
3 Comentarios:
Muy bien, todo incentivo a la juventud emprenderdora en bienvenida.
Saludos
Eliana Quintero
La gente joven preparada para cambiar el mundo?
Desde luego por falta de preparación no será, nunca en la historia de este país la gente ha estado tan preparada. Luego aún queda un largo camino por recorrer. Encauzar la energía, saber por donde, y por donde no hay que ir. En fin, yo con 45 años me siento joven, y espero dar mucha guerra. Y también espero ver estos jóvenes comenzando a dar la suya.
Abrazos
Carlos
tardor.wordpress.com
A ver, cómo entiendes lo de preparación? Intelectual, espiritual , fisica o todas las anteriores. Me refería un poco màs al modelaje que están experimentando los (las) jóvenes en cuanto al liderazgo socialmente responsable. La juventud ha dado sus pasos gigantes en cada etapa de la historia de la humanidad, quizás por ser la edad de los sueños posibles. Lo que sucede es que las propuestas que se escuchan en Davos, en las facultades de Negocios, en las ODS cada vez más vienen de jóvenes que no pisan aún los 30 y lo sorprendente es que son propuestas coherentes como la de Ariel que lleva Cine gratis a las clases más necesitadas y la sostiene con los patrocinantes con mensajes de su marca o socialmente responsables que aprovechan las grandes masas. Negocio o no, es preferible empresas que transiten el camino de la RSE a otras que ni siquiera lo piensen. El caso es que se están multiplicando los emprendedores que toman consciencia de su entorno y lo están pensando desde muy jóvenes. 45 años es plena juventud para un lìder y si se es socialmente responsable y se contribuye a la cultura de la Paz , mejor.
Publicar un comentario